Conclusión
Es claro una estrategia de construcción de oposiciones en los discursos de la política mexicana, quienes en cada lado de la moneda, busca crear una imagen negativa del partido contrario.
La propuesta de reforma electoral es una propuesta apoyada por los partidos aliados al Presidente, que comparten las causas por las que es necesario votar a favor, porque los "otros" son quienes les hace mal al pueblo y solo están incentivados por el capital.
Para la oposición es una reforma que no mejorará al INE, solo lo destruirá y empeorará para servirle al Presidente, buscando convencer al ciudadano que ellos son los que tienen las malas intenciones, que ellos son los malos por lo que podrían hacer con ello.
Resulta interesante conocer los argumentos de ambas partes para poder interpretar mejor la situación política que envuelve esta reforma y su relación con el movimiento encabezado por el Presidente.
El discurso de aquellos quienes apoyan la reforma, repite la misma estrategia discursiva del del Presidente Andrés Manuel en su candidatura, acusando a los de ahora oposición de ser el cáncer de México, y que él y su partido debieran ser el remedio tan esperado. Mientras que el discurso de la oposición es uno en el que defienden al INE, su reputación y resultados para reivindicar la imagen del organismo electoral.
Las estrategias discursivas de cada discurso fueron son capaces de llegar a su objetivo específico de la ciudadanía, considero que aunque sean los resultados que cada parte quiere lograr, se crea un ambiente ciudadano de polarización. Una polarización de quienes apoyan y no apoyan la reforma, porque la oposición ni los aliados oficialistas puedan discutir y negociar, ya que cada uno estaría tratando de ofender al otro, llegando a nada.
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